VIVA
LA PENSIÓN MÁXIMA
(por Paco Molina. Diputado Provincial por IU en Zamora)
No tiene muy buena fama
la Pensión Máxima, pero de ella sin duda se puede decir, y con razón, que es “desconocida
y perfecta”.
La palabra “máxima” es
la que le perjudica más en esto de la mala fama
porque la gente da en creer que es la de Dios.
Se llama “máxima”
porque ninguna otra pensión del estado la puede superar. Y es el propio
Gobierno Español el que a través de los Presupuestos Generales, establece cada
año cual es la pensión máxima.
Actualmente está en
35.000 € brutos por año que se cobra en 14 pagas. “Brutos” quiere decir que a
esa cantidad hay que descontarle lo que se quede Hacienda.
Otra cosa es que luego
el personal tenga un fondo privado de pensiones a mayores, compatible con
cualquier pensión, y que cuando es muy grande hace que “aparezcan” los
conocidos como “jubilados de oro”
Cuando por ahí se oye
decir que los Diputados Nacionales con sólo 4 años, o los que sean, se llevan
la “pensión máxima”, al llegar a la edad correspondiente, es de esa de 35.000
de la que se está hablando. Indudablemente llegar a ella por esa vía es
injusto. ((Por cierto, también les pagan, como hemos sabido al renunciar a
ellas los de IU, una privada))
Ahora bien cobrar la
pensión máxima después de reunir los requisitos de años trabajados y cotizados,
siendo una suerte en la lotería de la vida, debe ser también motivo de orgullo
porque si no existiera ese tope-la pensión máxima-quienes la cobran tendrían
una pensión aún mayor, más grande todavía.
Es decir, por
cotización, los que cobran la pensión máxima deberían cobrar más dinero del que
reciben.
Por tanto estamos ante
un colectivo que no sólo pasa a ganar menos al jubilarse (cosa que no le ocurre
a todos), sino que, incluso, pasa a ganar menos de lo que le correspondería por
lo que había cotizado.
Y es que gracias a que
existe la “pensión máxima” existe un buen número de ciudadanos que son “solidarios
forzosos” o “solidarios a la fuerza”, porque renuncian a lo que les tocaría si
no hubiera tope, y con esa cantidad se consigue que haya más pensiones.
Que exista una pensión
máxima es socialmente de lo más justo, y que exista a la fuerza, es lógico,
pues si se diera a elegir a los afectados, adiós solidaridad.
Lo que no se entiende
es por qué habiendo una pensión máxima, y entendiendo todo el mundo que la debe
haber, e incluso considerando mucha gente que es muy elevada, ¿por qué decimos?
siendo todo así de claro, ¿por qué no defiende el pueblo que exista una sueldo
máximo?
Eso para los empleados públicos. Y para el resto de la
gente, que se redujera lo que ganara cada cual, mediante impuestos progresivos,
hasta que se quedaran sólo con una cantidad parecida a ese sueldo máximo.
Zamora-3 de Diciembre del 2011. Paco Molina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario